Ya en la primera mitad la diferencia se disparó de manera increíble sentenciando el encuentro anticipadamente. En defensa el equipo fue muy permisivo y en ataque jamás se encontró una vía de gol fluida para mantenerse en el partido. Si bien la diferencia máxima que llegó a ser de 36 (66-30) no refleja la realidad entre los dos equipos, la remontada final sólo maquilló el resultado en un encuentro que se estuvo mas lejos de lo que marcan las cifras finales.
Ante la ausencia de Sebastián Brizuela, la responsabilidad ofensiva fue casi exclusivamente de Martín Bianchi que fue el goleador con 29 puntos escoltado por Nahuel Mayo con 15.
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